Descripción

La estrecha e histórica relación entre Japón y el pueblo Coria del Río inspiró a Antonio Bizcocho, experto en turismo, para crear el «Keicho Sake» y, a partir de ahí, no sólo nació un producto innovador y único, sino una empresa, Sake de Coria, que ha dado origen a otros productos que ofrecen «sabores de otra época».

Antonio Bizcocho no se apellida Japón, pero tiene la vena comercial y marinera de los samuráis que visitaron su pueblo. “..Hice el sake para tener un souvenir representativo de Coria que ofrecer a los visitantes…”, cuenta Antonio Bizcocho, «…y al final el proyecto ha crecido y ahora se ha convertido en algo grande…».

Aunque los corianos ya beben los licores de Sake de Coria “a litros”–como dice su inventor–, el uso más importante del Keicho Sake o del Sakura es el de regalo. Hace cuatrocientos años unos japoneses desembarcaban en esta localidad sevillana cargados de porcelanas y piezas de arte para dejar en la localidad un recuerdo de su paso. Gracias a aquella visita y el ingenio de Antonio Bizcocho, hoy los corianos pueden devolverles el recuerdo de su estancia con este trago saleroso.